Esta funcionalidad es una de las optimizaciones creadas para que el sistema de calefacción sea realmente inteligente; el sensor solo está integrado en las Smart Valves y en los Radiadores Eléctricos WiFi.
Cuando el sensor detecta un descenso brusco de la temperatura (al menos 1,5°C en 10 minutos), envía una orden de apagar el dispositivo durante 30 minutos (independientemente de que el radiador esté calentando o no en ese momento).
En el caso de una Smart Valve, esta cerrará el radiador.